Fuerza.
Hay
demasiadas definiciones para esta, sin embargo, siempre se utiliza la clásica
en todos los casos. Y no es cierto, no todo el mundo posee la misma fuerza,
igual que nadie posee los mismos ojos ni la misma personalidad.
Siempre
habrá obstáculos en la vida que te harán tropezar, pero también sonrisas que te
levantarán. A veces uno tiene que aprender cómo caer, y en la misma cantidad,
cómo reponerse. No importa que no ocupes más de 1.60m o que peses menos de
60kg, porque la verdadera fuerza, es el poder mental...No hay nada malo es que
uno sea débil, porque todos en algún momento lo hemos sido. Lo que de verdad
importa en la vida, es que reconozcas todos los errores que has cometido, cuáles
son tus debilidades y mejorar cada día.
Uno es
fuerte cuando es capaz de levantar unas pesas de 100kg, uno es fuerte cuando es
capaz de correr los 100m lisos y no cansarse, pero uno es aún más fuerte cuando
es capaz de soportar no derramar 100 lágrimas y convertirlas en serenidad y
paz. Uno no es más fuerte cuánto menos débil es, es más fuerte cada vez que lo
acepta.
Se necesita
verdadero poder mental, para superarse cada día.... Correr, caer, y levantarse
de nuevo. Aceptar nuevas metas en la vida, nuevas entradas y nuevas
consecuencias que resolver. Todos somos fuertes, nada es imposible de lograr
para las personas si de verdad se cree en uno mismo y se desea con todo su
ser... Esa, es la verdadera fuerza, la capacidad y la forma de afrontar los hechos
que suceden mientras vives...
Ama, ríe,
llora, siente, padece, cae, salta, vuela, sueña... encuentra tu felicidad.
...y no dejes
que nadie
te diga que no eres fuerte...
porque eres la más fuerte del mundo.
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