De cargarte los principios del mundo,de morirte de un ataque de risa...

                                                                                     Bye Bye summer...
 Es gracioso como un verano puede cambiarlo todo. Debe ser el calor, y el olor a lluvia después de una tormenta de verano, el ardor de tus pies después de caminar mucho tiempo por la acera, la sensación de libertad o simplemente la ausencia de rutina.
O también puede ser esos días tan largos y perezosos, que simplemente no haces nada o esos días que tienes ganas de perderte en el mundo, porque no dependes de nadie, de cachondearte de esa gente que te crítica o te odia, de besarle, de bailar, de cargarte los principios del mundo, de morirte de un ataque de risa. Depende desde qué perspectiva lo mires, puede ser el final de una historia o el principio de otra, o ambas a la vez. Te olvidas de todo lo anterior, las rayadas, las movidas,el curso, esos labios amargos….Pero no todo es malo, recuerdas todas las risas acumuladas con tus amigas, que son tu otra familia, y por supuesto que hay broncas, porque somos distintas pero eso es lo que hace que estemos tan unidas, superas los obstáculos a pesar de los lloros y hace que existan aun mas lazos, solo quieres volar. Definitivamente, en verano te distancias, dejas de preocuparte por el mundo…solo existes tú.
Y luego te das cuenta que vuelve otra vez todo…otro año, otras navidades, toca volver a empezar, pero no desde cero, porque sabes que todo lo que te ha preocupado en el pasado empieza a encajar, que has luchado, has reído y has caído y que todo aquello tenía un significado, aunque tu todavía no lo vieras. Empieza otro año más, todo ha cambiado, tú has cambiado, pero te apetece, te apetece volver a reírte del mundo y abrazar a aquellos que tanto quieres.
El verano solo es verano, el verano es un cambio que apetece a todo el mundo, porque es libertad, es amor, es alejarte por un tiempo de la realidad y volar tan alto como te deje tu imaginación.